Bitcoin no es solo "oro digital": análisis de su valor único
Llamar a Bitcoin simplemente "oro digital" subestima en realidad el verdadero potencial de esta moneda revolucionaria. Aunque esta metáfora es intuitiva y fácil de entender, oculta las profundas ventajas técnicas y la innovación financiera de Bitcoin.
Ante conceptos sin precedentes, las personas tienden a buscar referencias familiares. Antes de que el público comprenda profundamente el mecanismo de Bitcoin, "oro digital" es, de hecho, una analogía fácil de aceptar. Bitcoin tiene escasez, universalidad y función de reserva de valor, características que son similares al oro.
Esta narrativa ha impulsado la adopción a nivel institucional y nacional, e incluso ha influido en la formulación de políticas. Sin embargo, si Bitcoin va a cumplir su máximo potencial, esta comprensión simplificada debe actualizarse.
Bitcoin está lejos de ser un simple "oro digital". Equipararlo con el oro, en realidad, subestima una innovación monetaria que está revolucionando el sistema financiero tradicional. Las propiedades fundamentales de Bitcoin hacen que las cualidades por las que el oro se enorgullece parezcan obsoletas, mientras que es más rápido, seguro y descentralizado que la moneda fiduciaria.
Escasez y finitud
La razón por la que el oro se ha convertido en una herramienta de almacenamiento de valor a largo plazo se debe principalmente a su escasez. En los últimos cien años, la producción anual de oro ha crecido solo entre un 1% y un 2%. La dificultad de exploración, junto con los altos costos, hace que la expansión masiva de la producción carezca de incentivos económicos.
Esta limitación de suministro natural ha permitido que el oro obtenga estatus monetario desde la antigüedad. Sin embargo, en la era del Bitcoin, parece inapropiado seguir utilizando activos con fluctuaciones de suministro como medida de valor. El Bitcoin no es escaso, sino "limitado". Su cantidad total está permanentemente fijada en 21 millones de monedas, y no aumentará por ninguna razón.
A través de métodos matemáticos y tecnológicos, la humanidad ha tenido por primera vez una moneda comercializable con un suministro fijo, un significado que va más allá de lo que puede abarcar el "oro digital".
Diferenciabilidad
Aunque el oro se puede cortar, es difícil decir que es "altamente diferenciable". Solo bajo condiciones específicas se puede lograr esta característica de manera forzada. Por lo tanto, el oro es adecuado para transacciones de gran volumen, pero es difícil de utilizar para pagos diarios.
A lo largo de la historia, las personas han resuelto este problema emitiendo monedas de oro con un contenido fijo. Sin embargo, esto también ha sembrado las semillas de la devaluación monetaria. Con el paso del tiempo, el contenido real de oro de las monedas a menudo se reduce, lo que lleva a la depreciación del valor de la moneda.
El oro como activo carece de divisibilidad, lo que dificulta su utilización efectiva a largo plazo. Para realizar transacciones pequeñas, los ciudadanos a menudo entregan el oro al gobierno a cambio de monedas de igual valor, pero este mecanismo puede ser manipulado, lo que lleva a la dilución del valor de la moneda y al colapso de la confianza social.
A lo largo de la historia, ningún sistema monetario basado en el oro ha logrado evitar la devaluación. La demanda real de microtransacciones ha obligado al público a depender de los billetes de banco y monedas de bajo valor emitidos por el estado, lo que ha llevado a la pérdida del control directo sobre la riqueza.
Bitcoin ha logrado un avance en este tema. Su unidad mínima "satoshi" equivale a 1/100,000,000 de Bitcoin, y su capacidad de microtransacciones ha superado al dólar. Las transacciones de Bitcoin no requieren intermediarios, los usuarios pueden realizar transacciones directamente utilizando la unidad de valor más pequeña, convirtiéndose así en un verdadero sistema monetario sin intermediarios.
Por lo tanto, comparar el oro con Bitcoin en términos de divisibilidad y unidad de cuenta se ha convertido casi en una broma.
Auditabilidad
La auditoría de las reservas tradicionales de oro suele ser de baja frecuencia y poco transparente. En cambio, la verificación de Bitcoin se realiza de forma automática. A través del mecanismo de prueba de trabajo, el sistema verifica automáticamente la legitimidad de las transacciones, la oferta total y las reglas de consenso cada 10 minutos.
En comparación con la auditoría tradicional que depende de la confianza de terceros, Bitcoin ha logrado una verificación en cadena que es sin necesidad de confianza y completamente transparente. Cualquiera puede verificar los datos de la blockchain de manera independiente y en tiempo real, y "no confíes, verifica" se ha convertido en el principio fundamental de Bitcoin.
Portabilidad
La ventaja de la movilidad del Bitcoin es evidente. El oro tiene un gran volumen y un alto peso, y su transporte transfronterizo requiere herramientas especializadas. El Bitcoin, en cambio, se almacena en una billetera digital y, sin importar la cantidad, su "peso" siempre es cero.
La verdadera ventaja del Bitcoin no solo radica en su ligereza, sino en que no requiere "movimiento" físico. En la realidad, recibir pagos en oro implica asumir costos de transporte y riesgos de confianza con intermediarios. Las transacciones transnacionales involucran múltiples etapas, y cada una de ellas es parte de una cadena de confianza.
Bitcoin no necesita intermediarios. Los usuarios pueden realizar pagos transfronterizos directamente a través de la blockchain, con transacciones completamente públicas y verificables, sin riesgo de fraude. Esta es la primera vez que la humanidad realmente posee "efectivo electrónico".
Antes de la aparición de Bitcoin, las transacciones P2P no presenciales eran aún una hipótesis teórica. Las opiniones que creen que "lo que no se puede ver ni tocar no es real" serán gradualmente eliminadas en esta era de rápida digitalización.
Repensar la forma en que se difunde Bitcoin
Si el objetivo es simplemente impulsar el precio de Bitcoin, entonces la narrativa de "oro digital" es realmente efectiva. Sin embargo, si se considera a Bitcoin como una revolución tecnológica que cambia el orden de la libertad, se debe reconsiderar la forma en que se difunde. Para que Bitcoin ocupe un lugar central en el sistema financiero de libertad global, es necesario comunicar su singularidad a aquellos que aún no han tenido contacto con Bitcoin, en lugar de depender de metáforas simplificadas.
Bitcoin debe ser reconocido como una forma completamente nueva de moneda, y no solo como un sustituto digital del oro.
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PumpingCroissant
· 07-10 17:41
Llevar ladrillos durante diez años significa hacer pedidos de manera estable
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FUD_Whisperer
· 07-10 08:27
El oro ha sido reemplazado por la IA, ¿y todavía están hablando de eso?
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AirdropHunterXiao
· 07-10 08:24
¿Todavía hay gente que grita oro oro oro todos los días? Ya es 2024, fren.
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SerLiquidated
· 07-10 08:19
¿Todavía hay gente hablando de la narrativa del oro en 2024?
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DeFiChef
· 07-10 08:06
btc es como un lingote de oro digital, ¿qué más se puede decir?
Bitcoin supera al oro digital: análisis de su valor revolucionario y ventajas
Bitcoin no es solo "oro digital": análisis de su valor único
Llamar a Bitcoin simplemente "oro digital" subestima en realidad el verdadero potencial de esta moneda revolucionaria. Aunque esta metáfora es intuitiva y fácil de entender, oculta las profundas ventajas técnicas y la innovación financiera de Bitcoin.
Ante conceptos sin precedentes, las personas tienden a buscar referencias familiares. Antes de que el público comprenda profundamente el mecanismo de Bitcoin, "oro digital" es, de hecho, una analogía fácil de aceptar. Bitcoin tiene escasez, universalidad y función de reserva de valor, características que son similares al oro.
Esta narrativa ha impulsado la adopción a nivel institucional y nacional, e incluso ha influido en la formulación de políticas. Sin embargo, si Bitcoin va a cumplir su máximo potencial, esta comprensión simplificada debe actualizarse.
Bitcoin está lejos de ser un simple "oro digital". Equipararlo con el oro, en realidad, subestima una innovación monetaria que está revolucionando el sistema financiero tradicional. Las propiedades fundamentales de Bitcoin hacen que las cualidades por las que el oro se enorgullece parezcan obsoletas, mientras que es más rápido, seguro y descentralizado que la moneda fiduciaria.
Escasez y finitud
La razón por la que el oro se ha convertido en una herramienta de almacenamiento de valor a largo plazo se debe principalmente a su escasez. En los últimos cien años, la producción anual de oro ha crecido solo entre un 1% y un 2%. La dificultad de exploración, junto con los altos costos, hace que la expansión masiva de la producción carezca de incentivos económicos.
Esta limitación de suministro natural ha permitido que el oro obtenga estatus monetario desde la antigüedad. Sin embargo, en la era del Bitcoin, parece inapropiado seguir utilizando activos con fluctuaciones de suministro como medida de valor. El Bitcoin no es escaso, sino "limitado". Su cantidad total está permanentemente fijada en 21 millones de monedas, y no aumentará por ninguna razón.
A través de métodos matemáticos y tecnológicos, la humanidad ha tenido por primera vez una moneda comercializable con un suministro fijo, un significado que va más allá de lo que puede abarcar el "oro digital".
Diferenciabilidad
Aunque el oro se puede cortar, es difícil decir que es "altamente diferenciable". Solo bajo condiciones específicas se puede lograr esta característica de manera forzada. Por lo tanto, el oro es adecuado para transacciones de gran volumen, pero es difícil de utilizar para pagos diarios.
A lo largo de la historia, las personas han resuelto este problema emitiendo monedas de oro con un contenido fijo. Sin embargo, esto también ha sembrado las semillas de la devaluación monetaria. Con el paso del tiempo, el contenido real de oro de las monedas a menudo se reduce, lo que lleva a la depreciación del valor de la moneda.
El oro como activo carece de divisibilidad, lo que dificulta su utilización efectiva a largo plazo. Para realizar transacciones pequeñas, los ciudadanos a menudo entregan el oro al gobierno a cambio de monedas de igual valor, pero este mecanismo puede ser manipulado, lo que lleva a la dilución del valor de la moneda y al colapso de la confianza social.
A lo largo de la historia, ningún sistema monetario basado en el oro ha logrado evitar la devaluación. La demanda real de microtransacciones ha obligado al público a depender de los billetes de banco y monedas de bajo valor emitidos por el estado, lo que ha llevado a la pérdida del control directo sobre la riqueza.
Bitcoin ha logrado un avance en este tema. Su unidad mínima "satoshi" equivale a 1/100,000,000 de Bitcoin, y su capacidad de microtransacciones ha superado al dólar. Las transacciones de Bitcoin no requieren intermediarios, los usuarios pueden realizar transacciones directamente utilizando la unidad de valor más pequeña, convirtiéndose así en un verdadero sistema monetario sin intermediarios.
Por lo tanto, comparar el oro con Bitcoin en términos de divisibilidad y unidad de cuenta se ha convertido casi en una broma.
Auditabilidad
La auditoría de las reservas tradicionales de oro suele ser de baja frecuencia y poco transparente. En cambio, la verificación de Bitcoin se realiza de forma automática. A través del mecanismo de prueba de trabajo, el sistema verifica automáticamente la legitimidad de las transacciones, la oferta total y las reglas de consenso cada 10 minutos.
En comparación con la auditoría tradicional que depende de la confianza de terceros, Bitcoin ha logrado una verificación en cadena que es sin necesidad de confianza y completamente transparente. Cualquiera puede verificar los datos de la blockchain de manera independiente y en tiempo real, y "no confíes, verifica" se ha convertido en el principio fundamental de Bitcoin.
Portabilidad
La ventaja de la movilidad del Bitcoin es evidente. El oro tiene un gran volumen y un alto peso, y su transporte transfronterizo requiere herramientas especializadas. El Bitcoin, en cambio, se almacena en una billetera digital y, sin importar la cantidad, su "peso" siempre es cero.
La verdadera ventaja del Bitcoin no solo radica en su ligereza, sino en que no requiere "movimiento" físico. En la realidad, recibir pagos en oro implica asumir costos de transporte y riesgos de confianza con intermediarios. Las transacciones transnacionales involucran múltiples etapas, y cada una de ellas es parte de una cadena de confianza.
Bitcoin no necesita intermediarios. Los usuarios pueden realizar pagos transfronterizos directamente a través de la blockchain, con transacciones completamente públicas y verificables, sin riesgo de fraude. Esta es la primera vez que la humanidad realmente posee "efectivo electrónico".
Antes de la aparición de Bitcoin, las transacciones P2P no presenciales eran aún una hipótesis teórica. Las opiniones que creen que "lo que no se puede ver ni tocar no es real" serán gradualmente eliminadas en esta era de rápida digitalización.
Repensar la forma en que se difunde Bitcoin
Si el objetivo es simplemente impulsar el precio de Bitcoin, entonces la narrativa de "oro digital" es realmente efectiva. Sin embargo, si se considera a Bitcoin como una revolución tecnológica que cambia el orden de la libertad, se debe reconsiderar la forma en que se difunde. Para que Bitcoin ocupe un lugar central en el sistema financiero de libertad global, es necesario comunicar su singularidad a aquellos que aún no han tenido contacto con Bitcoin, en lugar de depender de metáforas simplificadas.
Bitcoin debe ser reconocido como una forma completamente nueva de moneda, y no solo como un sustituto digital del oro.